jueves, 29 de enero de 2009

Semana Aurgi

Esta semana está siendo movidita. La verdad es que, a priori, estaba diseñada como "semana de descarga" y también como "semana de revisiones".

Pero, como perdí todo el finde de la anterior (en la que no tenía ni un día DT), la mala conciencia me llevó a entrenar finalmente el lunes (60' CC fácil) y repetir, aún convaleciente, el martes (50' CC fácil). Al menos, trabajamos a ritmo light y lo que descargamos así es la mente y el "Pepito Grillo" que no puede evitar hacer su aparición cuando las planificaciones no se cumplen a rajatabla.




Supongo que si Q. sabe esto, cuando insistió expresamente en descargar y estirar los tres primeros días de la semana, no lo aprobaría. Yo prometo que voy a tratar de ser buena y obedecer siempre que esté en mis manos pero, al haber descargado involuntariamente los dos días anteriores, no podía dejar pasar más tiempo sin hacer algo un poquito más "alegre" que una sesión de estiramientos y un volumen flojito y suave en la pisci.

En serio, palabrita de niña güena que, mientras no sigan surgiendo imprevistos yo acato la plani tal y como viene.




El miércoles, de nuevo, tuve que perder el entreno de piscina que tenía que hacer. Tenía cita en el médico (donde perdí media mañana) y cita en el banco (donde perdí la otra media).
A la tarde, después de comer, tenía la tercera cita del día: con el dentista, como nos ha solicitado el entrenador. Fui para revisión y, como faltó un cliente, ya aproveché su hueco para sellarme dos microcaries que tenía y tomarme medidas para el fatal instrumento que debo incorporar a partir de ahora a mi vida diaria: una férula de descarga (para los de la E.S.O., un "bocado" como los que usan los boxeadores).




Lo de las microcaries me sorprendió un montón, porque en todas las revisiones que me he hecho siempre he salido de consulta con el mismo comentario por parte de los dentistas: "Joer, guapa, con muchos como tú tenemos que cerrar las clínicas".

Y parece ser que el motivo está relacionado con el tema de la férula; un poquito (o mucho) de estrés que hace que inconscientemente, en momentos de tensíon aprete la mandíbula y vaya dañando el esmalte de los dientes.




El cepillado es bueno, la limpieza, también... pero la cabeza la tengo medio "pa' allá" y ahora, de premio, me tendré que acostumbrar a dormir con semejante accesorio. En fin... a ver si así aprendo a adoptar la mentalidad oriental esa de la paz interior, el nirvana, etc.
Y así, pasé mi miércoles completito sin mover un sólo músculo pero con los otros deberes hechos: análisis solicitados (que me haré la semana que viene, cuando esté limpia de bichos) y dentista visitado.


Hoy ya tocaba empezar a abrir boca. Por motivos logísticos tenía que invertir el orden de las sesiones: primero, pisci (2000 suaves) y luego, sesión durita de spinning (que debía haber sido suave... pero bueno...)
He estado con Paloma en ésta última y nos hemos dado caña pero bien. Hemos acabado empapadas pero contentas porque, lo bueno de esto del spinning es que, si quieres ser serio y sincero contigo mismo, entrenas a cascoporro. Que dice "carga total", pues a petar las patas... y luego, a llorar de dolor.
No es que esto sea lo mejor en una semana de descarga... pero bueno... como ya hemos trastocado tanto las cosas, por un poquito más...

El caso es que mañana, adaptando toda la semana que he puesto patas arriba, tendré que hacer el test de fuerza máxima que tengo pendiente repetir y saldré a correr otros 40'-45'. Después, intentaré sacar tiempo para estirar bien, que esta semana es lo que más tendría que haber hecho y lo que menos he hecho.


Por otra parte, hoy hemos estado probando los modelos de ropa de competición que vamos a tener. He elegido un mono básico, porque el élite es muy caro y muy delicado, así que, aunque tenía muy buena pinta, he decidido que me lo tengo que ganar: cuando sea buena, me lo compro; por el momento, me conformo con el otro.



La otra opción era el dos piezas, que me parece más una buena elección para los de Larga. A mí nunca me acaban de convencer las gomillas a la altura de la cintura.

Y para finalizar, los compis me han dado algunos productos con los que nos obsequia el patrocinador, para utilizar en entreno y competición. Vienen con bidones de regalo... es guay esto!!! (Yo, que no estoy muy acostumbrada a los regalitos, flipo de alegría con estos detalles).




Y a ver si ahora que el tiempo se está poniendo bonito, aguanta un poco y me permite hacer la tiradilla larga en bici este domingo... que ya tengo unas ganas de pedalear viendo cómo se mueve el mundo a mi alrededor... porque lo del spinning está bien, pero sólo para "de vez en cuando"...

domingo, 25 de enero de 2009

Descargando antes de tiempo

Acaba la semana y el final no ha sido el mejor entre los posibles.
Cumplí con los entrenos hasta el viernes... pero ya llevaba un par de días "forjando" una extraña tos seca (de procedencia y origen desconocido) que me ha llevado a tomar una decisión salomónica con respecto al entrenamiento: "cortar de raíz"; así que, me he pasado el sábado y domingo descansando y sin entrenar (aprovechando que el tiempo era horroroso) y a ver si mañana puedo recuperar una de las tres sesiones que me he dejado sin hacer.




No sé qué opinará Q. de esto. Yo he considerado que sería lo más prudente, porque una tos tonta mal curada se suele convertir en un problema respiratorio agravado e incómodo de varios días (o, en el peor de los casos, semanas).

Y como decía, dado que el tiempo impedía sacar la bici para hacer la salida larga... y que la intensa lluvia posterior también hacia compleja la tirada larga a pie, pues he optado por aquella máxima de la escuela según la cual: "el orden de los factores no altera el producto".


Y queriéndomelo creer (pero sabiendo que tampoco es lo más adecuado), he dejado estos dos días pasar, a modo de descarga, y trataré de entrenar más fuerte mañana y el martes, para volver a descargar hasta el sábado, con sesiones flojitas en duración e intensidad.
Porque Q. insiste en que es necesario descansar. Y voy a intentar seguir su planificación tocándola lo menos posible.




Lo peor es la sensación esta que me queda cuando las cosas surgen así; porque siento que se pasa el día sin hacer nada productivo... ahí, tranquilita y sin hacer muchos alardes para recuperarme cuanto antes... pero la impaciencia me puede y veo que la tos sigue igual, que apenas hay mejoría. Y entonces se me pasa por la cabeza la idea de mandar el reposo a la mierda y salir a luchar contra el viento y el agua, destripando los charcos con mis zapatillas y machacando el barro con mis pies.
Pero vuelve la voz de la conciencia: "noooo, ten calma! Mañana será otro día"




Y mañana veremos qué puede ser!

jueves, 22 de enero de 2009

Al mal tiempo... propiocepción

Al mal tiempo, buena cara... se suele comentar. Y mal tiempo, este año, la verdad es que estamos teniendo para hartarnos. Lo cierto es que yo ya estoy bastante cansadita de frío, lluvia, nieve y viento. Pero estamos en Enero y es lo que toca! El invierno pasado, con esos soles de diciembre y las temperaturas rondando los 15ºC, fue atípico y nos dejó para el actual muy "malacostumbrados".




Y como algo hay que hacer para tratar de sustituir las sesiones que quedan ahogadas por tanta lluvia, pues tenemos que acudir a las "máquinas infernales" (léase: cinta, rodillo, spinning...)




Bien está que sean útiles para hacer entrenamientos de calidad; bien está que nos permiten ser conscientes con mayor facilidad de los gestos técnicos que componen la zancada y el pedaleo... pero, lo cierto es que poco más le puedo sacar a estas sesiones. En el otro lado de la balanza (la parte mala) quedan la desmotivación, el aburrimiento gris que me produce el hecho de verme encerrada y la sensación de que algo falta porque, por mucha transferencia que haya entre el entrenamiento indoor y el outdoor, el triatlón requiere de la intemperie para ser "auténtico".

Así que, en lo que llevo de semana (y lo que me queda, me temo), mis sesiones han sido "entre paredes".
El lunes, como ya conté, me remojé, para acabar con la sequía de la semana anterior.

El martes, tocaba correr (y tocó en la cinta). Así que lo adapté, quedando 45 minutos de carrera continua progresiva hasta llegar a superar el 90% de la FC máx.



Luego, volví a la pisci, con sensaciones similares a las del día anterior pero con mejor sabor de boca (al nadar las últimas series a pies de "Fredy-cachalote", lo cual me sirvió para mejorar mi marca en 100 m.). Aún sigo sintiendo que nado en una balsa de aceite, que me cuesta más avanzar y que realizo movimientos ineficaces en los que pierdo energía útil para progresar eficazmente. A ver si reencuentro mi camino!

Ayer, que estaba de guardia, pude sacar un ratito para llevar a cabo una sesión de spinning suavecita de algo más de una hora. Después tuvimos una salida, pero fue un "gatillazo" y regresé al parque con tiempo para hacer la sesión de gimnasio también.
Noto que estoy recuperando fuerza. Tiro mejor con más peso y vuelvo a hacer las dominadas con más ligereza.




Y para acabar, hoy, jueves, tenía una hora de carrera continua aeróbica. Pero esta mañana llovía a cántaros, así que, haciendo otro esfuerzo psicológico más, me metí otros 45 minutos de cinta, tratando de hacer hincapie en el braceo y la corrección de la pisada.

Sonará como que así se hace más llevadero. Pero no... a pesar de haber sustituido la penosa música que ponen en el gimnasio con mi mp3, cargado de mis temas favoritos, la sudada y la sensación de cobaya humana siguen ahí.



En fin... a ver si vemos asomar los soles por el horizonte prontito. Que esto del invierno no es nada bueno; No hay más que ver cómo se ha incrementado la cantidad de enfermos que estamos atendiendo en las últimas guardias.




Ay... el veranitoooo!!!

lunes, 19 de enero de 2009

Últimas noticias

Bueno, vuelve a haber transcurrido demasiado tiempo desde la última entrada que escribí.
Pero siempre hay un motivo (o excusa...)
Esta vez, la cuestión está en que la última semana ha sido movidita. Tanto, que he tenido que dejar de lado alguna sesión de entreno en favor de los movimientos burocráticos relacionados con la búsqueda de una hipoteca para mi casita.


Sin embargo, hay cositas sobre las que me gustaría comentar algo:



El domingo 11... al fin!... conocí a mis compañeros del Club. No a todos, pero sí a una gran parte de ellos; yo salía de guardia e iba un poquito "pillada" a la cita en el polideportivo. Cuando llegué al hall, aún esperaban a algún rezagado más, con lo cual... tranquilamente, nos cambiamos para llevar a cabo la sesión de spinning de 90 minutos.




Estuvo genial. Dirigida por Quino (el entrenador) y finalizada con un puntito heavy de intensidad por su mujer, Paloma, la sesión me llevó a experimentar otro modo de entrenamiento muy interesante.

Después, tras comer algún gel y recopilar las barritas que nos proporciona Weider (quien va a ser uno de los patrocinadores de nuestro club), soltamos un poquito en el agua, donde me encontré muy cómoda siguiendo los pies de mis compis. Es una novedad para mí lo de nadar a pies de alguien y, la verdad, se nota un montón la facilidad con la que se avanza.




A continuación, nos trasladamos al otro polideportivo, donde íbamos a comer "en familia". La quedada fue muy chula. Con las parejas y los críos de muchos de los compis, se respiraba un ambiente entrañable. Me lo pasé muy bien.


Ese mismo día, para rematar la tarde, quedé con Tito y los chavales para ver "Resistencia", película que me sorprendió gratamente y para cenar en el "VIPS".
Así que, podría decirse que ese domingo fue un buen punto de partida para comenzar esta nueva aventura del entrenamiento en compañía, y una buena jornada para "socializar" ;o)



El resto de la semana he cumplido con las sesiones programadas de bici:
- Spinning el lunes (para seguir con las sensaciones de "pete" del domingo).
- Spinning el jueves en el parque de bomberos (ante la imposibilidad de hacer rodillo allí).
- Salida de 73 km. el sábado, a una media aún pobre (27.51 km/h)

Las sesiones de gimnasio también las pude salvar: trabajé pesas el lunes y el jueves.

Sin embargo, los trámites bancarios y otras obligaciones añadidas, han impedido que pudiese acercarme a la piscina en toda la semana.
Así que hoy, que tenía descanso total, no he podido evitarlo y me he ido a nadar 2500 m. para ir recuperando sensaciones.

En el agua estoy fatal; esa ha sido mi conclusión de hoy. No sé si será por la sesión de bici del sábado, sumada a la hora y media de carrera continua de ayer y añadida a no haber tocado el agua desde el domingo pasado... o si es que estoy perdiendo sensaciones.




Lo cierto es que me encuentro peor ahora, siguiendo los entrenamientos del "jefe", que cuando me los diseñaba yo. La estructura de las sesiones es completamente distinta: son bloques más largos, con muchos más cambios de ritmo, etc. y me cuesta más acabarlos con calidad.
De momento, no quiero rallarme mucho, aunque ya empiezo a hacerlo puesto que había avanzado un montón desde el comienzo de temporada. Sin embargo, confío en que esto sólo sea una falta de adaptación y que las cosas cambien cuando haya que meter series más cortas y ritmo de competición.


Por otra parte, ayer estrené mi nuevo par de zapas. Las Adidas Response Cushion ya tenían más de 700 km y empezaba a notar molestias en cadera y rodilla.
Fui a comprar unas nuevas que fuesen bien con mis plantillas y, finalmente, me traje unas Brooks. Es una marca nueva para mí, pero en la sesión de ayer saqué muy buena impresión de ellas: son algo menos ligeras que las Adidas, pero más estables.



De todos modos, hay un gesto técnico que tengo que tratar de modificar para evitar tensar las estructuras músculo-ligamentosas de la parte externa del muslo. He sabido de ello recientemente y tendré que hacer trabajo de concienciación y técnica para corregirlo.


Y para finalizar (cambiando de tema), me permito la licencia de recomendar varias pelis que he visto este fin de semana:

- El otro día cogí en la biblioteca "Todos estamos invitados" y "Heroína". Ambas me han gustado bastante. Yo soy bastante de cine social y los dos filmes tocan temas que me inquietan, desde puntos de vista muy peculiares. En la primera trabaja Óscar Jaenada, que es un actor que me llega especialmente. Tengo la impresión de que siempre escoge guiones donde es capaz de dar todos los matices al personaje al que interprete. Parece que éstos se hagan a su medida y no lo contrario. La segunda está protagonizada por Adriana Ozores, que lo hace bastante bien.




No son grandes películas pero sí creo que ayudan a "movilizar las neuronas" en un ratito de entretenimiento.

- Además, ayer por la noche fuimos Tito y yo al cine y estuvimos viendo " 7 almas". Es la nueva película de Will Smith. Sensible y desconcertante... da qué pensar.




Hoy he vuelto a la carga con los asuntos hipotecarios alternados con esa sesión de nado que antes comentaba. Espero poder cumplir con la rutina de entrenamiento de la semana, aunque el tiempo (meteorológico y cronológico) me lo va a poner chungo.

Así mismo, Quino nos instó ayer a hacernos unas analíticas y una revisión bucal para hacerse una idea de los "males" que nos puedan achacar y programar/actuar en consecuencia.





Con lo que ya tengo tareas añadidas a toda la movida semanal.
Seguiré ampliando datos...

viernes, 9 de enero de 2009

Blanco

El conjunto de todos los colores. El cómputo de toda la gama de tonos que crea el arcoiris. El COLOR, así... en mayúsculas.
Hoy todo es de color en Madrid. Porque todo está blanco. Ha nevado tanto como nunca había visto por esta zona. Y el paisaje que queda enmoquetado en blanco es de lo más especial.

Amanecí a eso de las 9.00 a.m. Cuando me cruzo con mi madre en el pasillo me comenta: "Vaya suerte la tuya... Ayer os echan el hormigón del forjado y hoy está todo nevado".






Qué bajoncete!!!
Tanto tiempo pensando en cómo hacer mejor las cosas, dándole mil vueltas a todo para que no surjan trabas que se conviertan luego en problemas gordotes y, al final, la casualidad ha querido que salga el día más frío (y con la nevada más grande) en 5 años, justo cuando nuestro hormigón está recién tirado.

En fin... la lucha contra los elementos es una batalla perdida así que, después de maldecir la "Ley de Murphy" durante unos minutos, he preparado la mochila y me he pirado a entrenar.

Hoy tenía una hora de carrera y 2400 metros de nado (con 5 x 400m con técnica e intervalos, de bloque principal).

La carrera ha tenido que ser en cinta (aunque lo he dejado en 45', porque en el aparatejo ese del diablo salgo con peores sensaciones musculares y la FC se sube mucho antes).

Luego me fui a la pisci a cumplir con lo antes mencionado (aunque el entreno no me salió como para estar orgullosa de él) y acabé disfrutando de los chorretes, hidromasaje y jacuzzi a tope.

Qué gozada!!! Se ha notado la dificultad que ha tenido la gente para moverse con los coches (estaba Madrid completamente colapsado) en el hecho de que las instalaciones estaban desiertas. Me sentía como una pijilla: ahí, en medio de chorretes calentitos mientras, al otro lado de los cristales, la nieve se acumulaba y casi todo el mundo pasaba apuros para transitar por las vías principales en toda la Comunidad. Privilegio absoluto!

Pero el remate ha sido al salir al jacuzzi exterior: como el agua estaba calentita, se acumulaba una niebla densa, por el contraste con la temperatura ambiente y era como transportarse a Finlandia.

UMMMHHH, con lo que me gustan a mí los países nórdicos: qué chulada... un jacuzzi a 38 ºC, rodeado de nieve por todas partes... con copitos que caían y se deshacían inmediatamente.






Recomendable al 100%. Vaya regalazo me han dejado al final los Reyes Magos (aunque haya sido un poquito más tarde... no podían haber preparado nada mejor).

Negro


Dicen que el negro es la ausencia de color. Igual que dicen que el blanco es el conjunto de todos los colores unidos. Es curioso y bonito el contraste que crean.

Casi siempre visto de negro. No es por aquello de que sienta bien, de que estiliza o aporta elegancia. Simplemente, me gusta.
Cuando voy a comprar ropa (lo cual no ocurre muy frecuentemente), me sucede algo bastante peculiar. De hecho, hasta hace muy poco tiempo no era consciente de ello y, ahora que lo soy, trato de evitar caer en "la trampa".


Lo que me sucede es que voy buscando alguna prenda que necesite y, cuando encuentro lo que se aproxima a la idea que tengo en mi cabeza, por más que me guste y me la pruebe en color rojo, naranja, verde o amarillo (si la hay), me la acabo comprando negra.





Tito dice que esa elección no es más que una extrapolación de mi modo de ser y de ver las cosas; él siempre dice que soy una tía muy pesimista, con tendencia a meditar las cosas demasiado, a poner trabas del tipo "y si..." o "por si...". Una tía negativa.

Durante mucho tiempo pensé que llevaba razón; mi modo de enfrentarme a las cosas se suele aproximar bastante a eso. Siempre me coloco una especie de "parapeto" por delante, un "escudo", algo que me garantice que, si viene un golpe, a menos así, será más flojito.

Sin embargo, en otras ocasiones analizo mi forma de ser y me doy cuenta de que ese "encasillamiento" no es justo; porque, en el fondo, el que es negativo y pesimista, el que lo ve todo negro, no lucha. Y yo soy bastante peleona. Y lo soy en prácticamente todo lo que se me ponga por delante: así es como saqué mi licenciatura en 5 años justitos; De esa manera, aprobé mi oposición desbancando a todos los que me llevaban la ventaja de ser interinos; Así es como intento levantar mi casa actualmente del mejor de los modos y así... así escarbo cada día entre la desgana para que aflore mi fuerza de voluntad para cumplir con cada uno de los entrenamientos que me servirán para progresar en el deporte que practico.




Yo creo que si fuese pesimista, negativa, etc. no tendría ilusión ni esperanza. Creo que ahí está la diferencia. Yo soy muy entusiasta. Me gusta tener proyectos, llevar a cabo mis deseos (cueste lo que cueste) y lo único que me duele es comprobar que todo no puede salir como lo planeo. El afán que he tenido siempre por controlar lo que llevo a cabo desde el principio al fin, ansiando que todo salga correctamente, me ha hecho ganarme ese "sambenito"; cuando algo no salía según lo esperado y yo sufría una decepción (y me tomaba mal las consecuencias), Tito venía a recordarme que soy N E G A T I V A.

Pero ya no quiero ese calificativo para mí; porque, realmente, no me describe.

Todos tenemos un polo positivo y uno negativo. Y mi polo negativo no es más grande que el positivo. Conozco a gente a la que eso sí le sucede. En nada se parecen a mí.

Así que, aunque me vista muchas más veces de negro que de naranja o rojo, aunque me queje cuando algo no sale como yo quería, aunque mi afán por la perfección a veces se interponga por delante del sosiego y haga algunos problemas más grandes de lo que en realidad puedan ser... creo que, por muchos otros motivos, pero sobretodo porque me gusta sonreir, disfrutar de mi gente y mis amigos, tener grandes proyectos y vivir la vida... merezco que no se me considere una persona negativa.

lunes, 5 de enero de 2009

Año Nuevo... Nuevo Club


Y así es como estreno, efectivamente, este nuevo año: como miembro de un club que nace con mucha fuerza y muchas ganas: Enphorma Triatlón.

Ayer tuve la primera conversación con Quino, que va a ser quien guíe mi destino triatlético. Le estuve orientando un poco acerca de lo que he estado haciendo hasta ahora; de mis rutinas de entrenamiento, mis volúmenes relativos a tiempos y distancias habituales por semana, los puntos débiles, etc.


Hablamos un ratillo largo y, a continuación, me envío vía mail la primera ficha (de la semana del 5 - 11 enero) y me explicó detalles que debía tener en cuenta de cara a la realización de las distintas sesiones.

Hoy, con muchas ganas de probar estos entrenos (que no distan demasiado de los que yo venía haciendo, pero que me aportan cositas muy novedosas), me he puesto en marcha hacia el polideportivo y he llevado a cabo lo previsto.
* 2400 metros de nado, con trabajo de técnica
* Test de fuerza máxima sobre 7 ejercicios de distintos grupos musculares.

La sesión de pisci me ha llevado menos de una hora. La de gimnasio, algo más.
He optado por nadar antes, ya que si me metía el test de fuerza lo primero, la técnica en el agua se iba a resentir bastante. Creo que la decisión ha sido adecuada, aunque el trabajo a 1 repetición máxima es muy exigente muscularmente y, por mucho que hayas calentado y preparado el grupo muscular, hay que andarse con cuidado para no tener un sustito.



Los resultados han estado en el nivel que esperaba (aunque ya no estoy tan brutica como cuando escalaba, aún puedo alcanzar niveles aceptables de fuerza).

Mañana toca correr. Haré lo posible por mantenerme en los valores de FC que me marca la ficha y cuidaré la técnica, para entrenar en condiciones.

En cuanto a las diferencias con lo que yo venía haciendo, por el momento, detecto una reducción del volumen de carrera y natación, en favor de una mayor carga de bici. A ver si el tiempo acompaña, que lo de machacar las dos ruedas me va a venir de perlas.

En resumen, las primeras impresiones son muy buenas. Seguiré enphormando...