martes, 13 de mayo de 2008

Carrera de la mujer

Ayer pude formar parte del ritual en que, año tras año y en diversas ciudades de toda la geografía española, participan miles de mujeres: la Carrera de la Mujer (en Madrid).
Una de las cosas más bonitas es el hecho de que parte de la recaudación, (en este caso, 12.000 €) van destinados a la Asociación Española de Lucha Contra el Cáncer.

Después de un desayuno apropiado, a base de un plátano, kéfir con cereales, un par de tostadas con aceite de oliva y miel y dos galletitas, emprendimos camino hacia el Parque del Buen Retiro, mi mami (Mica), con quien formaba equipo "Madre e Hija", Mª Mar y yo.

Aparcar fue bastante sencillo, teniendo en cuenta que se habían inscrito 13.000 mujeres. Dimos un paseo alegre hasta la zona de salida, recogimos nuestros chips y camiseta (algo tarde, por lo que sólo nos pudieron dar tallas "L") y dejamos las mochilas en el ropero.
Íbamos justas de tiempo, así que fuimos corriendo hasta el arco de salida, donde estiramos un poquito y, en cuestión de pocos minutos, comenzamos a correr.

El ambiente era espectacular: El Retiro se tiñó del azul de las camisetas de las participantes.

Como en el último momento, Mar se fue a los baños y ya no la vimos, mi Mikita y yo nos fuimos a buscar sitio en las primeras filas, para correr lo más cómodas posible.
Dieron el pistoletazo de salida y, enseguida, las primeras "galgos" (Ana Burgos, las Sanfabio, etc.) fueron ganando distancia con respecto a la marea azul.

Yo traté de encontrar mi ritmito y me adapté muy bien a la prueba: el primer kilómetro lo piqué en 4:16. El segundo, que era casi en completa bajada, en 4:07. A partir de aquí, el recorrido se ponía llanito (ni p'arriba ni p'abajo). A ritmo de 4:03 lo cubrí con comodidad, mientras iba superando a alguna que otra que se había cebado demasiado.

Pero entonces llegó la cuestota. Un kilómetro y pico de dura subida en el que no me vi tan redondita como en otras ocasiones. Fue en este momento cuando superé a una madre que iba tirando del carrito de su hija (finalmente, clasificadas en 2ª posición en esa categoría). Qué tía más brava!!

Para mí, fueron los peores momentos; superé a alguna que otra rival, pero también me pasaron algunas. Piqué en 4:49 (una bajada de ritmo descalabradora). Y para rematar, fui todo el tiempo equivocada, pensando que teníamos que correr 6 km. en lugar de los 5 que hicimos finalmente.

El caso es que me mosqueé cuando vi que nos metíamos en el interior del Parque, en lugar de bordearlo, como había visto en internet. Parece ser que, para evitar excesivos problemas con el tráfico, se modificó con poca antelación y yo no me había enterado.

De todos modos, cuando vi que acababa antes de lo previsto, noté que tenía fuerzas para un sprint final decentillo. Y esto hice. El último kilómetro, con el último trocito de subida, me fui también a 4:40.

La marca total de 22:05 no es como para estar orgullosa, especialmente, teniendo en cuenta que he marcado mejores tiempos en el Cross de Sanse y el primer parcial del Duatlón de Alcobendas.


Pero bueno, sí que hay datos esperanzadores: 42ª clasificada en la General, (de 13.000 inscritas y 8420 participantes que finalizaron la prueba), 11ª senior de 1353 y 3º puesto en la clasificación de la categoría "Madre e Hija".

Mi mami, una campeona en esto del running, marcó en meta 24:38. Fue 4ª de su categoría y llegó en el puesto 167. Para quitarse el sombrero y hacerle reverencias, ehhh???


La prueba la ganó Alba Fernández (17:05), seguida por la maravillosa Ana Burgos. Madre mía, y pensar que tienen un ritmo por kilómetro un minuto más rápido que el mío... Qué superclases!!!

Sin embargo, no quedamos nada contentas con la organización de la prueba: nada de frutas, refrescos o barritas energéticas y descontrol absoluto en la entrega de premios (demasiado tarde) y en la publicación de clasificaciones.

Está bien que esto sea una fiesta de la Mujer y del Atletismo, aunque la mayoría anda o acaba andando. Pero deberían tener en cuenta que, para otras, también es un aliciente como competición en sí.

Antes de los podios hubo un festival de aerobic que no debió estar mal pero del que pasamos totalmente, para ir al coche a dejar las mochilas.
Y, a la hora de recoger nuestro trofeo, y después de haber estado con el informático solucionando un fallo en la publicación de nuestros resultados, la entrega se hizo chapuceramente. Fue una desilusión que acabó amargando el buen rollo general.


De todos modos, si obviamos eso, y que me faltó un poco de chispa, no tengo una mala sensación general, porque las piernas sí que me respondieron.

Hoy, tras recoger los resultados de mi analítica de los que ya escribiré con más tiempo (en términos generales, todo está ok), he aprovechado para salir a correr y tratar de percibir si los gemelos van avanzando positivamente.
He rodado 45' (recorrido de 8500 m.), o sea, a ritmo de 5:18. No está mal teniendo en cuenta que llevo mucho tiempo sin poder entrenar con regularidad. Las sensaciones, sin embargo, no han sido todo lo buenas que desearía.
Iba con mi mp3, muy suelta de cardio, pero bastante congestionada con mi pata izquierda. Y es que, sigue sin darme tregua: noto molestias por todas y cada una de las zonas de la pantorrilla. Unas desaparecen para dar paso a otras nuevas y nunca mejores.


En fin... sólo espero que en el Triatlón de Cullera (-4 días) todo vaya bien. Que pueda acabar disputándolo (es decir, sin tener que globear por problemas físicos) se ha convertido en mi objetivo. Que los Dioses me acompañen!!!


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